26.8.06

Simplemente Francisco de Miranda

Juan Pablo Valero


"Bochinche, bochinche, esta gente no sabe hacer sino bochinche", fueron las palabras del Generalísimo Francisco de Miranda, cuando los jóvenes Simón Bolívar, Juan Paz del Castillo, Tomás Montilla, José Antepara, Miguel Carabaño, entre otros, irrumpieron en sus aposentos para arrestarlo y entregarlo al dominio español por traición a la patria.

Estas simples palabras quedaron impresas en la historia de Venezuela y se constituyeron en parte de la poderosa pasión de un hombre que luego germinó en miles de alma y logró la ansiada libertad en los países de la América Latina.

Diego Risquez ha sido el cineasta que ha traído a la gran pantalla la vida de este insigne hombre que la historia ha sabido retratar de muchas formas y le ha hecho justicia, no con la pluma como se hacía en los tiempos en que este venezolano universal vivió, sino con la cámara y con sinfín de ideas, que se plasmaron en un mágico lienzo en movimiento que es la película "Francisco de Miranda".

Cinco años de esfuerzos dieron sus frutos y se convirtieron en un filme digno de recordar, que narra la vida de un héroe de carne y hueso, víctima de sus dioses y demonios, que luchó por un ideal de libertad y en su camino participó en las grandes revoluciones de la historia, como fue la independencia de los Estados Unidos, la revolución francesa y la liberación de los países de América del Sur.

Con la creación fílmica de Risquez y las letras de Leonardo Padrón, se demuestra que no es necesario contar con los millones de dólares que usa una película americana, para hacer algo verdaderamente trascendental, porque "Francisco de Miranda" es una cinta que perdurará por décadas como una de las mejores producciones hechas en este país.

La película narra la vida de este personaje desde el momento en que decide salir del país hacia España, para conquistar al mundo que se encontraba al otro lado del mar. Desde adolescente vio con tristeza como su padre, Don Sebastián de Miranda y Ravelo, fue víctima de constantes humillaciones por su origen, porque era proveniente de las Islas Canarias y por lo mismo era considerado "blanco de orilla", a pesar de que tenía el rango de Capitán de Milicias.

A partir de ese momento el joven Francisco de Miranda se convierte en un verdadero trotamundos y recorre cuatro continentes, estando en lugares como Rusia, Marruecos, Cuba, Inglaterra, Jamaica, Estados Unidos y Francia, por tan solo mencionar a algunos.

Durante estos viajes el prócer también conquistó los corazones de muchas damas y en la película fue presentado como un verdadero casanova, cuya fama lo perseguía donde él llegaba. Este elemento ha levantado quejas de algunos funcionarios y varias personas que han visto la cinta, pero realmente se retrata a un ser humano lleno de pasiones, dudas, sombras y virtudes; como cualquier persona normal y corriente, sin los favores y prejuicios propios de una redacción en un libro dedicado a preservar la historia. Al final la película se convertirá en una especie de documento histórico con carácter de longevidad, mientras que lo dicho de esta producción se perderá con el pasar de los días.

Esta gran película de corte nacional, es una obra para todo el cual se sienta orgulloso de ser venezolano, porque en ella hay de todo y serpentea con mucha elegancia entre las diferentes corrientes del pensamiento, tanto las que estaban en boga en aquellos tiempos, como los que hacen vida en nuestra nación en los actuales momentos.

Una escena que revela esta característica es la firma del acta de la independencia, donde se puede ver a Pedro León Zapata, Tarek William Saab, Carlos Genatios y Luis Chataing, firmando el documento que elevó a Venezuela al rango de independiente y prendió la mecha de un polvorín que incendió a todas las naciones de habla hispana.

Las actuaciones también fueron excelentes Luis Fernández, como el polémico personaje de nuestra historia, merece una mención aparte, porque interpretó a la perfección los momentos de la vida una persona, desde los impulsos propios de la juventud, hasta la reflexiva madurez de un hombre que contemplaba los momentos finales de su existencia.

El resto de los actores hicieron un gran trabajo, pero el peso de las secuencias por lo general recaía en el protagonista y por eso pasaron un poco más desapercibidos, aunque ninguno de ellos dejó ningún vacío en los roles que interpretaron, hasta el propio Risquez, quien tiene un papel dentro de la trama, hizo de las suyas a nivel histriónico.

Esta cinta que cuenta con 90 actores y más de 300 extras, con escenas que parecen pintadas por Arturo Michelena o Martín Tovar y Tovar sobre el celuloide, es una gran opción, que no debe dejarse de ver, porque forma parte de la indescriptible pero magnifica condición de ser venezolano.

Extraoficialmente se conoció que en las salas de cine nacional la presencia del héroe criollo pudo derrotar a las aventuras del hombre de hierro, Superman, hecho que demuestra que Venezuela es un país de grandes personajes y de muchas historias que merecen ser llevadas a la gran pantalla, con la grandeza con que Risquez renació a Miranda, bajo una nueva bandera, como el siempre soñó.




19.8.06

En un futuro no tan lejano

Juan Pablo Valero




No ha terminado el 2006 y ya los estudios de Hollywood están enfilando sus baterías para lo que será la batalla de la taquilla y por lo que se ha podido ver tienen un mejor arsenal que el demostrado en la edición de esta temporada, que si no fuera por la última entrega de los Hombres X y la nueva entrega de las aventuras del pirata Jack Sparrow se iría con un saldo para olvidar.

El estreno más esperado es la tercera parte de Spiderman, quien en esta ocasión tendrá que vérselas con tres enemigos de peso como Venom, Sandman y el Duende Verde, en medio de un film que promete grandes emociones y muy buen nivel de histriónico por las incorporaciones al elenco de los actores: Thomas Haden Church, quien dará vida al atormentado Flint Marko o mejor conocido como el "Hombre de Arena", y Topher Grace quien se convertirá en Eddie Brock, la antítesis del superhéroe arácnido.

El resto del elenco queda como se ha presentado en las anteriores películas y según los expertos en el tema, podría ser la película del 2007, aunque tiene que batirse en duelo con la tercera parte de la secuela de Piratas del Caribe, donde los personajes tendrán que ir al verdadero fin del mundo.

Otros estrenos insólitos revisten de duda la llamada creatividad en los estudios de producir películas realmente nuevas y por eso recurren a éxitos pasados o a la resurrección de sagas aparentemente cerradas para seguir viviendo de la nostalgia.

"Rocky Balboa", sería la sexta parte de este boxeador, que impactó a la crítica especializada y se convirtió en un verdadero clásico del séptimo arte, pero cuando todo estaba terminado, renace de sus cenizas, bajo la dirección de su propio creador, Silvester Stallone, quien dirigirá, producirá y protagonizará el filme. En esta ocasión Rocky regresa a los cuadriláteros para tratar de enrumbar su vida, luego de quedar viudo, con una relación pésima con su hijo y con un juego de vídeo basado en su carrera como pugilista; el sexagenario boxeador se sube a la lona para enfrentarse a un campeón mundial, quien pelea con rivales de menos categoría para mantener su título, y espera que los 60 años de Rocky serán suficientes para ponerlo a dormir a la cuenta de 10, pero a lo mejor ese criterio es un error que le va a costar caro.

Las Tortugas Ninjas fueron en su momento un icono, especialmente para los más jóvenes, quienes admiraban a estas fantásticas criaturas, que fueron expuestas junto a su "maestro" a una sustancia genética experimental y entrenados por esta rata experta en artes marciales, una idea nada espectacular, pero que dio resultados en su momento. Ahora estos personajes regresan a la gran pantalla sin las limitaciones de los actores disfrazados de tortugas, porque ahora tendrán unos kilos menos y una piel hecha en un 100 por ciento por animación por computadora. Su estreno se prevé para el mes de marzo de 2007.

Los Transformers debutan en la gran pantalla, bajo la batuta del taquillero director Michael Bay y es una de las cintas que buscan los favores de la taquilla. En esta incursión al séptimo arte todo comienza cuando la sonda especial Beagle 2 enviada al planeta Marte registra el movimiento de una criatura robótica, que milenios antes había formado parte de uno de los dos ejércitos que libraron una batalla que aniquiló la vida en el planeta rojo.

En esta ocasión van al planeta Tierra donde completarán su pelea y los seres humanos tendrán que tomar parte en el conflicto entre los Los Autobots y los Decepticons, para salvarse de la extinción.

La película de terror que tomó de sorpresa a la crítica es Saw, quien tuvo una secuela regular hace pocos meses, regresa en su tercera entrega y según sus creadores se busca superar todo lo antes visto, aunque la verdad es difícil que lo logren, debido a la gran calidad del largometraje original donde no había grandes cantidades de billetes verdes, pero si mucha creatividad.

Pero no todo son películas taquilleras, de hecho hay dos películas que ya se están nombrando como favoritas a ser nominadas a los premios de la academia. La primera de ellas es de "The Departed" dirigida por Martín Scorsese y protagonizada por actores de la talla de Leonardo DiCaprio, Matt Damon, Jack Nicholson, Anthony Anderson, Martin Sheen y Mark Wahlberg.

La historia narra la infiltración de un miembro de la mafia en la policía y de un funcionario de la fuerza de seguridad en las organizaciones criminales, ambos personajes se dan cuentan que no son los únicos que están haciendo labores de espionaje y por eso hacen todo lo posible para saber quien es el traidor de su causa.

La segunda cinta que puede ser nominada como mejor película es "Babel" del director mexicano Alejandro González Iñárritu, el mismo de "Amores Perros" y "21 Gramos", quien cuenta en su elenco con Brad Pitt, Cate Blanchett y Gael García Bernal, quienes forman parte de una intrincada historia separada por las barreras del lenguaje pero unidas por el poder del sentimiento, en diferentes latitudes del planeta.

Sin duda algo digno de ver es "Francisco de Miranda" del cineasta Diego Risquez y con la presencia de actores como Luis Fernández, Mimi Lazo, Jean Carlos Simancas, Beatriz Valdez, Flavia Gleske, Marlene de Andrade y Ruddy Rodríguez. Una película venezolana digna de cualquier premio internacional y que no pertenece a un futuro cercano, sino a la actualidad, porque ya se encuentra en las mejores salas del país.

12.8.06

El ánfora en la playa

Juan Pablo Valero


De Las Vegas a Miami, se tiene un compás de imágenes en las series derivadas de CSI (Las Vegas), porque se desarrollan en una urbe que hace todo por mostrarse a las cámaras, como una modelo de catálogo, como es el caso de la capital del estado de Florida; mientras que "la capital del juego" trata de venderse de otra manera, con atractivos carteles de neón y tentaciones que, en la mayoría de los casos terminan con bolsillos vacíos y otras con pase directo al "más allá"

Cuando la directiva del canal CBS, vio el tremendo éxito del serial original, se les encomendó a los creadores del show estelar que pusieran al aire otro seriado derivado del programa inicial; este hecho significó una tempestad de dudas entre los realizadores, dudas planteadas porque, en primer lugar si la serie era un fracaso, se podría generar el final de la franquicia y en el otro lado el éxito gigante, que serviría de pie para darle una severa estocada al seriado que marcó el inicio de todo lo que se conoce como CSI.

Una vez superado estos miedos, los productores salieron por lo largo y ancho de los Estados Unidos para conseguir una ciudad que sirviera de escenario para el nuevo proyecto y en Miami encontraron un lugar cosmopolita, repleto de culturas y una geografía generosa para quienes quisieran esconder cadáveres.

Con esto superado se buscó el elenco y la primera persona contratada fue la actriz Emily Proctor, quien interpreta a Calleigh Duquesne, una especialista en balística, quien puede reconocer el calibre de una bala con tan solo ver un pequeño fragmento del proyectil; ella oculta un pasado donde sus padres tienen un rol protagónico.

El segundo en entrar era el detective que haría de líder en este equipo; para ello se buscó un nombre que sonara bien a la audiencia y por eso entró en el staff el actor David Caruso, quien tenía una deuda pendiente con el mismo, cuando cometió uno de los errores más grandes del mundo artístico -según en canal E- al abandonar la serie "NYPD Blue" y al papel del detective Jhon Kelly, mediante el cual ganó un Globo de Oro y un premio Emmy, para hacer una carrera en el cine, que al final quedó en un recuerdo para olvidar.

Por esa razón, no lo pensó dos veces para volver a hacer de detective en la pantalla chica, esta vez bajo el nombre de Horatio Cane, un personaje con la moral a flor de piel, que muchas veces llega a cansar por lo enarbolado de sus principios y criterios a la hora de "combatir el crimen", los cuales recuerdan a los acartonados personajes como el de Bruno Díaz en la serie de Batman de los años 60 o a Cerebro de las serie animada "Pinky y Cerebro".

Su dualidad de amar a las víctimas y de odiar al criminal, hace caer al personaje en situaciones tediosas y son usuales frases como "vas a pagar todos tus crímenes en la cárcel" o cuando le hace exposiciones a los sospechosos de algún homicidio sobre lo que les va a pasar en el interior de los centros penitenciarios, cuando ingresen.

Un sello característico de Horatio Caine, es su pose que imita a un ánfora con los brazos en posición de asas, que dan una composición visual que emite un mensaje a la audiencia que indica que detective está cavilando una situación y en su mente estructurando una frase muy propia de "un paladín de la justicia".

A Adam Rodríguez le toca interpretar a Eric Delko, una reciente incorporación del equipo, especialista en la exploración de canales submarinos, hecho que ha ayudado bastante a la resolución de muchos casos, donde el arma homicida yacía en el fondo de un pantano, dentro de la inmensidad de Miami. Delco fue concebido en Cuba y llegó a los Estados Unidos en el vientre de su madre, cuando escapaba de su nación en las balsas y por eso es un eslabón importante en los criminalistas, porque es un enlace directo con la comunidad isleña que hace vida en esta ciudad tropical.

Completan el equipo Tim Speedle (Rory Cochrane), un especialista en rastros, medio amargado y con poca pericia en el manejo de las armas, lo cual se evidenciará en más de una ocasión durante la serie. También está Alexx Woods (Khandy Alexander), una forense que con la costumbre de hablarle a los cadáveres, con mensajes de cariño orientados a lo que ese muerto pudo ser, de no haber caído víctima de una mano asesina.

En líneas generales, la serie ha logrado su cometido, que es marcar diferencias con la original, para eso se basan en que los detectives de esta serie son policías, mientras que los de Las Vegas son científicos con armas asignadas. Por esta razón se tiene más acción física, aunque en comparación con el equipo de Gil Grissom, la acción emocional y la evolución de los personajes, hasta el momento, deja mucho que desear.

Los efectos especiales son protagonistas y el espectador ha visto aviones y avionetas precipitándose a tierra, hundimientos de barcos, huracanes y una variedad de eventos bien atractivos visualmente; lo que le da pie a criminales más sangrientos, aunque menos inteligentes que los de Las Vegas, porque en lo que fue de las primeras dos temporadas, a Horatio Caine y su equipo, no se le escapó ni uno.

5.8.06

Miami


Juan Pablo Valero
Hollywood se tropicaliza y se lanza a la conquista de la taquilla con la ascensión a la gran pantalla de una de las series de televisión más populares de todos los tiempos como lo es "Miami Vice" y aunque se tiene una gran expectativa de lo que pudiera hacer esta cinta, para nadie es un secreto que tiene que combatir con el pasado de este aclamado programa de televisión.

Bajo la tutela del director Michael Mann - el mismo de Collateral y creador de la serie Miami Vice-, esta cinta no pretende crear añoranza de lo que el espectador vio en sus hogares, gracias a la magia catódica de las "cajas chicas" y, por lo mismo, se presenta una buena película de acción adobada con elementos dramáticos.

Dio su primer paso con firmeza al destronar a la película reina de la taquilla - Los Piratas del Caribe -, aunque no por mucho, ya que apenas sacó 25 millones de dólares en el primer fin de semana de exhibición, sólo cinco millones de la segunda parte de la saga protagonizada por Depp y su pandilla.

Con estos números iniciales, difícilmente podrá sacar una buena figuración en líneas generales, pero para ser una película de acción sin grandes presupuestos como es el caso de la última entrega de los Xmen o Superman, es sencillamente aceptable.

Ese empeño de poner agua de por medio entre la serie, puede ser un factor determinante para que este largometraje pase como "uno más" por la memoria colectiva conformada por el sagrado universo de quienes les gusta el séptimo arte.

Hacer una secuela de este "cross over" no presenta dificultad alguna, porque con tan sólo colocar a los personajes dentro de una trama donde sean amenazados por el enemigo de turno se tiene la continuación ideal, aunque es necesario salir airosos de la primera parte.

Mann apuesta fuerte con dos actores muy funcionales y taquilleros, como es el caso de Collin Farrel en su papel de Sony Crockett y Jamie Foxx - ganador del premio Oscar por su interpretación en Ray - en su papel de Ricardo Tubbs, dos agentes encubiertos que buscan desenredar una red de narcotráfico en la ciudad de Miami.

De esta actividad de espionaje se genera un oscuro peligro para sus seres queridos, quienes se convierten en el blanco preferido de los amos de la droga al saber que hay infiltrados en sus líneas y por eso este par de agentes tienen que tomar el control y a fuerza de disparos salvar a los suyos y a la ciudad en la que trabajan.

El malo de la película es Jhon Ortiz, actor de origen puertoriqueño, quien es el director artístico y fundador de la compañía de teatro Labyrinth, la cual maneja en compañía de oscarizado Phillip Seymour Hoffman por su papel en "Capote". Ortiz le pone el peso de su actuación y nivela las interpretaciones de todo el elenco, logrando acoplarse sin problemas a la línea del director, quien es abiertamente conocido por darle peso al desempeño de sus actores, más que a cualquier golpiza, carro elegante o explosión de turno.

"Miami Vice", cinta escrita por el propio Michael Mann, es esperada con expectativas por muchos cinéfilos venezolanos, quienes fueron fanáticos de la serie de los años 80 y de sus actores Don Johnson y Philip Michael Thomas.

Este par del horario estelar de los canales de televisión de todo el mundo, convirtieron en moda todo lo que usaron, aunque en muchas ocasiones sus atuendos eran estrafalarios; los dos histriones eran sencillamente símbolos de la anhelación de las masas y cuando se canceló la serie, ambos pasaron a ser ilustres desconocidos.

Los dos compañeros de escena trataron de aprovechar su popularidad para tener éxito en el mundo de la música y debido a la poca calidad de sus propuestas, ambas producciones se fueron por el caño, aunque la de Johnson al menos logró conectar en las radios un hit llamado "heartbeat".

Thomas ha visto desaparecer su dinero y su reconocimiento, siendo obligado a ser portavoz de una línea psíquica - a la cual posteriormente demandó - y actuar en cuanto bodrio fílmico se le ha presentado, algo que en el fondo no es criticable, porque es una necesidad el comer.

El actor que escenificó a Tubbs en la serie, también ha tenido que lidiar con las burlas que generó el incidente de usar un collar que decía EGOT, en alusión a los premios Emmy, Grammy, Oscar y Tony, los cuales aseguró que iba a ganar, pero hasta el momento no ha obtenido ninguno.

Aprovechando el momento la cadena de televisión VH1, decidió relanzar la serie con una interesante promoción donde se usaban escenas del programa con doblajes alternativos donde Sonny Crocket y Rico Tubbs elogiaban sus ropas y los cuidados para ser los más avanzados fashionistas, cosa que ha generado buena recepción de los televidentes, quienes han vuelto a detener su control frente a los maravillosos escenarios de una ciudad conocida como Miami.