Hairspray

"Hairspray" es una muestra de los recónditos caminos que puede tomar Hollywood, para la creación de un filme y este en particular tiene un trayecto enmarañado y algo complicado de explicar.
Este largometraje musical que bien pudiera llamarse "laca" en español, nació de la creatividad de John Waters, quien hizo películas bastante agresivas y sórdidas que impactaron a la audiencia, pero no fueron un éxito comercial.
Waters decidió dejar a un lado su visión oscura de las cosas y decidió hacer películas un poco más comerciales como fue el caso de "Poliéster" y "Hairspray" en 1988.
Posteriormente en el 2003 se toma la película Hairspray y en Broadway se hace un musical, que resultó bastante exitoso y ahora en el 2007 se hace una película basada en ese musical, algo complicado el asunto, pero al fin de cuentas se puede decir que la versión actual es producto de una serie de mutaciones de una misma idea, demostrando que nada es bueno o malo, sino depende del cristal con que se mire y es por eso que se puede ver al padre de la criatura, haciendo un cameo, como un pervertido en una calle de la ciudad de Baltimore.
De todos los musicales que han salido recientemente, se puede decir que este es el más ligero de todo, sin ninguna premisa dramática, casi sin ningún obstáculo para los protagonistas, sin embargo no deja de ser sincera y a pesar de su simplicidad, tiene un mensaje contundente.
Sus canciones tienen una fórmula sencilla, son pegajosas y sin grandes artilugios, que a pesar de no ser una obra de arte, quedan en la mente del espectador por algunas horas, luego de finalizar la cinta, al fin y al cabo, esa es la idea y la cumplen a cabalidad.
En la vitrina de esta producción está una clara idea que es reivindicar a los marginados e imponerlos sobre los clasistas y racistas que mueven los hilos de los medios de comunicación de una sociedad que entraba en la década de los sesenta.
Para ello se uso una galería de personajes muy adecuados para esta idea y la punta de lanza fue Jhon Travolta, quien se disfraza de mujer para interpretar a la madre de la heroína y desde su no tan esbelta figura, se constituye en una especie de tribuna para fustigar a quienes piensan que una persona de color o con kilos de más no puede ser apta para conseguir sus sueños en un mundo, donde las apariencias son todo.
Este largometraje cuenta con un gran elenco, como es el caso de Cristopher Walken, quien viste la piel de Wilbur Turnblad, y así repite una faceta divertida de él, que es el baile y el canto, como se le vio anteriormente en el vídeo de Fat Boy Slim "Weapon of Choice".
Michelle Pfeiffer hace de Velma Von Tussle, una ácida mujer del espectáculo que quiere imponer el criterio de que sólo la gente blanca y atractiva tiene derecho a ser estrellas de televisión; con su presencia, irónicamente se juntan dos de los protagonistas de las dos partes de "Vaselina", quienes son enemigos declarados.
Completa la nómina de actores, Amanda Bynes, Queen Latifah, James Marsden, Zac Efron y Brittany Snow.
La película se centra en la aceptación del público juvenil de Baltimore a un programa de baile llamado "El de Corny Collins", en donde una de las anfitriones tiene que salir del programa por un lapso de nueves meses, y es por eso es que llaman a un casting para conseguir a la nueva bailarina.
En esta aventura se suma Tracy Turnblad (Nikki Blonsky), quien en su corta estatura y su conformación física un problema, porque en la televisión quieren ver a la gente estilizada, pero a pesar del rechazo inicial no se rindió y demostró su dotes de baile y canto, hecho que convenció a Corny Collins, quien en un acto de desobediencia decidió incluirla a pesar de las críticas adversas de los patrocinantes y de la despiadada productora.
Una vez en el programa Tracy conoce a un grupo de personas de color, que hacen la función del "día del negro" del show, y se une a su causa de no ser segregados, cuando la televisora intenta sacarlos del aire, hecho que pone en peligro su naciente carrera, pero al final, vale más sus convicciones personales que la fama y ella será un punto vital para desencadenar una serie de cambios que darán mucho de que hablar en los siguientes años.
La actriz Nikki Blonsky conoce muy bien los problema del papel que le tocó interpretar, porque a su corta edad y con 1,47 metros de altura, se ha tenido que enfrentar a la burla y a los sinsabores de ser despreciada por su apariencia.
Ella al igual que Tracy contó con unos padres que la apoyaron en todo, incluso en su sueño de ser estrella de cine y un día trabajando en una heladería se enteró que fue seleccionada para el papel protagónico que admiraba cuando la vio en el teatro, porque se sentía identificada con ella.
"Hairspray" con sus toques de comedia y con sus canciones pop, tiene una seria propuesta de fondo, hace una denuncia de una situación que a pesar de los años no ha cambiado y muestra un enfoque no común en Hollywood, donde las caras lindas y los cuerpos estilizados salen ganando por lo general.
También tiene una onda refrescante, porque es una muestra no coincidente con las acartonadas versiones de historias románticas, donde los protagonistas luchan con una serie de clichés para revalidar el sentimiento que poseen, en este caso no, sencillamente las personas se aman sin importar sus condiciones y se entregan a lo que sienten, porque lo que sienten no tiene color o talla, porque es universal.