Fin del mundo

Juan Pablo Valero

Piratas del Caribe en su segunda entrega fílmica tomó de sorpresas a muchos espectadores, porque no se trataba de una película con un final tradicional; por el contrario es la mitad de un filme, cuya trama concluirá el año que viene, con la exhibición de la tercera parte titulada "El final del Mundo".

El director Gore Verbinski y el aclamado productor Jerry Bruckheimer, no hicieron lo mismo que cuando salió la segunda y tercera entrega de la saga de Matrix, cuando el público estaba informado que tendrían que ver dos películas para completar la historia, en este caso se dejo el elemento sorpresa y así se dejó en shock a muchas personas que esperaban ver un final tradicional.

A la salida de las salas de cine de la ciudad de Valencia, los comentarios eran divididos con relación a la culminación de la segunda entrega de "Los Piratas del Caribe", muchos de ellos expresaron su molestia por tener que esperar una continuación para saber como quedan los personajes de esta taquilla cinta; otros mostraron su expectativa por la tercera, especialmente por el personaje que aparece en la última secuencia de este largometraje.

Decir que un final es malo porque deja al espectador esperando por el cierre de una historia en otra película, es algo aventurero, en primer lugar porque realmente no es un final y el hecho de que un cineasta necesite más de cuatro horas para contar una historia no es censurable, ni criticable, pero, lamentablemente buena parte del público que asiste a las salas de cine, está acostumbrado a parámetros impuestos por Hollywood y cuando se sale de los mismos se generan comentarios como los registrados por esta secuela.

Independientemente de lo que se diga de ella, tiene un gran mérito, que es revivir el género de los piratas, el cual parecía estar extinto y sólo recordado ligeramente por las versiones clásicas del cuento "La isla del Tesoro" de Robert Louis Stevenson.

"Pirates of the Caribbean: Dead Man's Chest" ha roto todos los récords de la taquilla hasta los momentos y ahora está detrás de la cima que en la actualidad ocupa "Titanic", aunque en realidad es casi imposible que sumerja al millonario trasatlántico del celuloide.

Con lo recaudado ya ha superado con creces los gastos de la producción de la segunda y tercera parte de esta saga y de aquí en adelante, todo es ganancia para los creadores de esta cinta, que parte de una atracción ubicada en uno de los parques temáticos de Disney.

Para hablar de la producción apellidada "Dead Man's Chest", se tiene que mencionar las secuencias originales que se pueden ver a lo largo y ancho de la misma, donde destaca una asombrosa pelea en una rueda de un molino que sale desbocada por el territorio de una isla.

Los antagonistas de estos disparejos héroes se llevan el show de los efectos especiales, porque en ellos recae la mayoría de los avances tecnológicos, para poder recrear a unos seres mitad humanos, mitad criaturas de mar, quienes son víctimas de una maldición de 100 años de servidumbre, bajo el tiránico mando de Davy Jones.

Un punto y aparte merece este terrorífico pirata que puede gracias a su apariencia monstruosas generar ciertos espasmos en algunas personas que asisten a las salas de cine, porque tienen que confrontar su aversión a algunas criaturas viscosas que viven en el fondo de los océanos.

Es importante para el espectador ver la primera película "La Maldición del Perla Negra", para tener elementos claves muy en cuenta, porque esta continuación está ligada íntimamente a la primera, a tal punto que no verla podría afectar completamente el poder entender la presente película.

Como una especie de adelanto de lo que será "Fin de Mundo" se puede decir que el guitarrista de Rolling Stones, Keith Richards, hará una aparición relámpago como padre del capitán Jack Sparrow, lo curioso es que el actor Jhonny Deep, se inspiró en este mítico personaje del rock para confeccionar al afamado pirata.